Celebramos el banquete de San Juan Evangelista, porque nos recuerda que el Apóstol mas amado por Jesús es el que intercede ante El, por nuestra comunidad Cristiana aquí en san marcos. Nada mas hermoso que tener a San Juan como nuestro santo patrono.
Si recordamos a Jesús reunido en la ultima cena con sus discípulos, El apóstol Juan es el discípulo que esta al lado de Jesús y coloca su cara en el pecho de Jesús para preguntarle en aquel triste momento, de quien lo traicionaría. Nosotros, hoy nos acercamos al Corazón de Jesús, como lo hizo san Juan, para contarle a El todos nuestros trabajos, necesidades, alegrías y para decirle que lo amamos y que nos siga acompañando en nuestra comunidad de San Juan como lo a echo durante estos 127 años que tiene esta parroquia.
Un poco de historia de nuestra parroquia para recordar por que fue dedicada a San Juan Evangelista. Inicialmente, los primeros sacerdotes que llegaron como misioneros a estas tierras de san Marcos fueron los Padres Franciscanos. Ellos vinieron evangelizando los indígenas que poblaron esta región, en los años 1700 al 1750. Estas misiones fueron abandonadas hasta 1883, cuando los Padres Jesuitas, en cabeza del Padre John Morendi, inicio la construcción de una pequeña Iglesia hecha en Madera. Esta primera Iglesia fue puesta bajo la protección de Nuestra Señora de Guadalupe. Así es que el primer patrón de nuestra comunidad fue la Virgen. En 1905, llegan los padres claretianos, asume como primer pastor, el padre Eugenio sugrantes. Al medio día del 4 de abril de 1915 el fuego destruye esta pequeña Iglesia y después de este momento difícil para la comunidad, se adelantan todos los esfuerzos en construir una nueva Iglesia para la comunidad de San Marcos.
El pueblo de San Marcos, pertenecía como parroquia a la Diócesis de San Antonio; fue así como el Obispo John Shaw sentó una piedra angular en octubre 11 de 1915 y sugirió que la nueva iglesia se dedique a Dios en honor de san Juan el Evangelista, su Santo personal. En 1970,dia de Pascua, esta nueva Iglesia, aquí donde hoy nos encontramos, fue abierta para la adoración por el padre Joseph Bochenski. Mis hermanos y hermanas, como vemos, nuestra Iglesia esta construida por la fe y el amor de muchas familias, sacerdotes, Diáconos y fieles que durante 127 años han estado sembrando y transmitiendo de generación en generación la fe en Jesucristo, en la santísima virgen Maria y en los sacramentos de la Iglesia.
Todavía hoy seguimos celebrando funerales de personas que dedicaron toda su vida a construir esta Iglesia en la fe y en el amor. Hoy cuando celebramos la fiesta de San Juan, sigamos sus enseñanzas. San Juan en su ancianidad, escribía tres cartas a sus comunidades, aconsejándoles, amarse los unos a los otros. Nuestra comunidad, esta inspirada en las enseñanzas del amor y del perdón. Esto es lo que nos hace más hermanos y hermanas.